Hay muchos patos picazo en la laguna. Este ejemplar que está cambiando al plumaje de macho adulto, ya los ojos están rojos y se está cubriendo de negro. Es seguramente uno de los tantos picacitos que vimos nacer aquí.
Grande fue la sorpresa cuando Nicolás envió la foto tomada el 11 de febrero con los seis pichones. Nicolás también los encontró solos y dice que los vio moverse con mucha cautela. El sábado 13 los buscamos y no los encontramos. ¿Mal augurio? Si alguien los ve, avise. por favor
Estos seis pichones aparecieron solos sin la madre. Vieron a la familia de patos de collar e intentaron unirse a ellos, pero los adultos no los aceptaron.
Nos quedamos un rato para ver si alguien se hacía cargo, pero estaban a la deriva. Si bien los patos no necesitan ser alimentados por los padres, estos los conducen hasta el lugar de alimentación y los protegen. Pequeños como son, se convierten en presas fáciles.
El pato más abundante en la reserva. Aquí se ven ocho. Llegué a contar 20 juntos en un lugar de la laguna